Optimismo en la igualdad

Tengo buenas sensaciones. Mejor dicho nunca las he perdido este año. Ahora, en las puertas de otra F4 (creo que nunca me cansaré) nos encontramos quizá el rival que más se iguala al potencial baskonista. Pero este Barça ofrece síntomas de debilidad cuando lo enfrentamos al Baskonia.

Es curioso pero cuando llegan citas de este tipo, tan importantes, ocurren cosa extrañas en un equipo de baloncesto. En el Baskonia se produce un descenso a los infiernos baloncestísticos que produce carajas que, como un resfriado, se prolongan 15 días y que termina con un +34 al Joventut. Por su lado el Barcelona con una trayectoria impoluta en los últimos 40 días se deja un partido en Manresa después de 4 prórrogas, 20 minutos de añadido y 122 puntos en contra.

Parece a priori que en la trayectoria reciente es el Tau el que lleva ventaja mientras que en la trayectoria a medo plazo el Barça es que ha sido más consistente. Sin embargo en un playoff yo creo que influye muchísimo el factor psicológico. Es ahí dónde los blaugranas pierden frente a los azulgranas. Ese es el factor desde el cual el Baskonia se apoya para buscar las quinta. Después el acierto y la defensa serán los salvoconductos para viajar a Berlín

Tengo la sensación de que Ivanovic se siente superior a Pascual y viceversa. Y eso me parece fundamental en una eliminatoria. Le ha ganado en todos los encuentros disputados hasta el momento. Es posible que Ivanovic pierda alguno de los que quedan por delante pero la sensación de que no hay plan que desarrolle Pascual que pueda vencer al Baskonia a largo plazo, quita muchos, sino todos, quebraderos de cabeza al técnico montengrino. Me parece un punto de tranquilidad para Ivanovic de cara a la eliminatoria: sólo se tiene que preocupar de miniminzar el caudal ofensivo culé sin tener que deternerse demasiado en el aspecto táctico del entrenador rival.