Existe un patrón fundamental para los croatas en cuestiones del cuero cabelludo. Estas pautas las siguen todos los ciudadanos croatas y por supuesto los jugadores que están enrolados en liga Acb.
1. El sueldo no lo inviertas nunca en la compra de un peine. Todo lo que te ahorres en el peine inviértelo en un neceser de 'supermarca'. Alguna vez, dentro de estas bolsas supercaras, se ha encontrado un objeto extraño, con púas, prácticamente fosilizado que siguen estudiando en Centro de Investiagación Patrimonial e Histórica de Croacia. adecentarse el pelo nada mejor que los dedos. Máximo exponente:
Roko Leni Ukic el hombre del pelo enmarañado marca acné.
2. El champú es algo irracional para cultura croata sin embargo el jabón es apreciado entre los croatas pero sólo el que se aplica en el cuerpo. Una arraigada creencia baloncestística croata afirma que Spahija, durante su época de jugador, fue uno de los que utilizó champú y se quedó como una bola de billar. Así que, despúes de la actividad física... un poquito de agua y listo. Máximo expondente:Zoran Planinic el hombre que pudo freir un churro en su frente
3. Existen croatas que en la familia tienen alguién que sabe cortar el pelo. Después de muchas generaciones y prácticamente en la clandestinidad han aprendido el oficio. Desafortunadamente no pueden perfeccionar el oficio dadas las pocas veces que lo practican. Por ello el corte es el mismo, al tres y peinado hacia adelante. Como esto del pelo en Croacia es un auténtico misterio, lo de seguir una linea recta en el corte no se lleva. ¡Ah! y la barba ni se toca. Si tienes te jorobas y si te pica te rascas. Máximo exponente:Dalibor Bagaric (¡Qué raro que Raül esté en el suelo!) Y Branimir Longin
4. ¡Los hay!. Si, hay croatas que van a la peluquería y son tan aficionados a que les corten el pelo que no tienen medida. Acuden cada semana e incluso piden al peluquero que les deje probar con sus utensilios. Disfrutan de un corte con tijeras pero la maquinilla les fascina y acaban comprandeso una en carrefour. Después de entrenar se pasan horas experimentando con el pelo pero las esquiladas a las que se 'autosomenten son de espanto'. Máximo exponente.
Marko Tomas el del Nombre de la Rosa
5. Pero hay croatas que van más allá. No se quedan satisfechos después del corte. Quieren pasar a la trastienda de la peluquería y experiementar con más utensilios. El extraordinario mundo del piercing y el tatuaje. Según llegan a la peluquería sacan su visa gold y exclaman orgullosos: ¡Córtame por encima de la oreja y tatúame un dragón chino con una tía en pelotas cabalgando en su lomo escamado!. Máximao exponente:
Mario Kasun quiere explotar una nueva línea de camisetas que resalten sus tatoos.
Sólo ha existido y existe un croata que ha ganado tras pasar por una peluquería y ese es nuestro amigo Neven que sigue viajando por el mundo en busca de nuevas aventuras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario