¿Cambios?

Las dos primeras fases del campeonato de Europa de selecciones no deberían pasar a la historia del baloncesto. El juego y las retransmisiones televisivas del mismo han sido en el 90% de los casos bastante repetitivos, ramplones y simplistas.

No debe sorprender a nadie que el baloncesto de selecciones absolutas siga unas pautas simples de mecanización de movimientos destinados a que resuelva la papeleta la estrella de turno pero lo de este campeonato es ya demasiado. En cada equipo se encuentra prácticamente lo mejor de cada país que a su vez suelen ser los mejores de su equipo. Como son los mejores de su equipo están acostumbrados a realizar los tiros decisivos o al menos los tiros para mantener a su equipo en partido pero, amigo mío, sólo hay un balón.

En el juego de selecciones como su propio nombre indica están los mejores. En este mundo los mejores son los hábiles y también los más grandes. Por no ir más lejos en las Olimpiadas de los Ángeles los equipos medallistas EE.UU., España y Yugoslavia tenían hombres altos y grandes sin embargo no son tantos como los que ahora integran cualquiera de las selecciones punteras. Ahora y después de veinte y pico años los bases miden dos metros, los aleros 2.05, el cuatro 2.10 y el pívot 2.20. ¡No hay sitio en el campo!

Los jugadores modernos, además de tener un mayor físico (ancho y largo) han afinado su puntería de tal manera que salvo cuatros y cincos todo el mundo es susceptible de lanzar desde más allá de la línea de 6,25. Una amenaza que reporta grandes beneficios: un ataque y medio en cada posesión. Esto es una solución inmediata para remontar o conseguir diferencias en un partido, con lo que no hay pases interiores, con lo que los pívots empiezan a jugar cada vez más arriba para que, haciéndose visibles, puedan recibir algún balón.

Si unimos estas tres características: gente a la que no le duelen prendas lanzarse un tiro, hombres altos y fuertes ocupando cada vez más campo defensivo y ofensivo y la facilidad de los exteriores modernos de enchufar de tres nos encontramos que lo único que se hace es llegar, dos pases y un lanzamiento de tres. No hay equilibrio de juego interior y exterior y se acaba lanzando más de tres de que de dos. No es de extrañar, por tanto, que la que juegue más en equipo tendrá un puesto en el podio.

Y esto se hace porque la estructura del campeonato no es la adecuada. Las selecciones favoritas se pasan las dos primeras fases por el forro de sus caprichos y de paso jugadores importantes también. Exagerando, selecciones como Eslovenia, España, Lituania o Rusia casi no deberían tener amistosos de preparación dado cómo se organiza el torneo. Para mí una fase y después cruces a muerte sería lo más adecuado (si la tele lo permite)

Otra cosa es la tele. La sexta hace un esfuerzo por ofrecernos todo el campeonato. Gracias. Intenta que lo pasemos bien con el partido o con los comentarios (más o menos acertados, más o menos graciosos) de sus colaboradores. Gracias. El mercado televisivo del baloncesto no está para criticar a la tele que apuesta por nuestro deporte. Sin embargo les recordaría que están ofreciendo todos los partidos y después de 20 uno empieza a cansarse de ‘Mr. Catering’, de ‘AK 47’ y de ‘jugón’ entre otros motes y muletillas.